Esta vez la implicada la representante a la cámara Leila Marlene Rincón.
Por estos días la representante a la Cámara por el Departamento del Huila Leila Marleny Rincón, es la protagonista del escándalo por maltrato laboral y deberá presentarse ante la Procuraduría, para responder por una denuncia realizada por Lina Paola Suárez Bedoya, quien fuera subordinada suya en la UTL Unidad De Trabajo Legislativo en el Congreso de la República.
Maltratos constantes
De acuerdo a la denuncia presentada por Lina Paola Suárez, la profe Leila como es conocida en el ámbito político, la maltrataba de manera permanente mientras ella desarrollaba su trabajo como abogada en la UTL. los maltratos fueron tantos que la abogada tuvo que conseguir un psicólogo que la atendiera.
De acuerdo a su relato, la abogada Lina Paola, expone cómo fue menospreciada por su experiencia profesional, marginada en sus funciones, violentada por su situación de salud mental y presionada incluso durante hospitalizaciones.
Humillaba a su equipo de trabajo.
Según el testimonio, la congresista desestimaba constantemente su trabajo, afirmando que no servía y que necesitaba contratar a un abogado “más grande”. Las agresiones también se dirigieron hacia otros miembros de la UTL, a quienes calificó como “comunicadores de vereda” o “mediocres”.
Los documentos relatan cómo la Representante se burlaba abiertamente del acento huilense, de la formación académica de su equipo, y de la salud mental de la denunciante, divulgando conversaciones privadas y recomendaciones médicas con personas externas.
Obligada a trabajar aún en hospitalización.
A esto se suma la presión para trabajar incluso durante hospitalizaciones, reuniones en horarios extremos (antes de las 6 a.m. o en fines de semana) y la asignación de tareas sin instrucciones claras, que fueron generando un deterioro emocional, ansiedad y aislamiento laboral.
Lo curioso, la abogada pide reintegro.
La doctora Suárez, acompañada por su apoderado Karol Mauricio Martínez, pide en su acción legal la revocatoria de la resolución que declaró su insubsistencia y su reintegro como asesora en la UTL, al considerar que su salida fue arbitraria y motivada por represalias ante su condición médica y sus recomendaciones psiquiátricas.
El caso cobra relevancia no solo por lo que revela sobre las dinámicas de poder dentro del Legislativo, sino también porque expone una constante: cómo los entornos laborales en la política pueden convertirse en espacios hostiles para quienes tienen condiciones de salud mental o simplemente no encajan en una lógica de obediencia sin cuestionamientos.
Nuestras Noticias buscó comunicación con la representante huilense Leyla Marleny Rincón, para corroborar las afirmaciones de la denunciante, pero no respondió.