Santa Fe se impuso a domicilio al Independiente Medellín y se corona por décima vez como campeón del fútbol colombiano.
Independiente Santa Fe se consagró campeón del fútbol colombiano al vencer 1:2 al Deportivo Independiente Medellín en el estadio Atanasio Girardot.
El conjunto cardenal alcanzó así su décima estrella, rompiendo una racha de más de nueve años sin títulos y dejando atrás el dolor de haber perdido tres finales consecutivas.
El encuentro comenzó con una propuesta ambiciosa por parte de Santa Fe, que intentó sorprender desde los primeros minutos. Sin embargo, fue el Medellín quien abrió el marcador al minuto 18 gracias a un certero cabezazo del argentino Francisco Fydriszewski, quien aprovechó un centro preciso de Chaverra desde la banda derecha. El gol encendió el estadio y dio impulso al equipo local.
Santa Fe reaccionó y, tras varias llegadas sin éxito, logró el empate a los 32 minutos. Un saque de banda cobrado por Elvis Perlaza fue peinado por Ewil Murillo, y Harold Santiago Mosquera apareció libre de marca para cabecear al fondo de la red. A partir de ese momento, el equipo bogotano tomó mayor confianza y cerró mejor el primer tiempo, dominando la posesión y jugando en terreno rival.
Una jugada que vale un título
El segundo tiempo fue intenso, con ambos equipos generando opciones. Medellín intentó con remates de Rodallega y Mosquera, mientras que Santa Fe movió su banco para refrescar el ataque. La jugada definitiva llegó al minuto 79, cuando Edward López se inventó una gran acción por la banda derecha y asistió a Hugo Rodallega, quien remató de primera para marcar el gol del título, justo antes de abandonar el campo por molestias físicas.
En los minutos finales, el Medellín buscó con urgencia el empate, pero no logró vulnerar la sólida defensa cardenal ni al arquero Andrés Mosquera Marmolejo. Santa Fe resistió hasta el pitazo final y celebró con euforia su décima corona, un logro que lo devuelve al lugar de privilegio en el fútbol colombiano.
Con este título, Santa Fe no solo corta una larga sequía, sino que reafirma su grandeza y recupera la ilusión de su hinchada, que volvió a celebrar tras años de espera.