Según la Fiscalía serían los responsables de la desaparición y muerte de 10 personas en diferentes departamentos, la fosa común estaba en el municipio de Gigante.
Tras el escalofriante hallazgo de varios cuerpos en una fosa común en zona rural en el municipio de Gigante, en el centro del Huila, los investigadores de la Fiscalía adelantaron todo un proceso de seguimiento.
De acuerdo a las investigaciones de los especialistas de la Fiscalía General de la Nación, Óscar Leonardo Rojas Andrade y Deiner Alfonso Valencia Contreras, tendrían toda la responsabilidad en la desaparición y muerte de 10 personas en zona rural de Gigante.
Los cuerpos de las víctimas fueron hallados en fosas comunes en zona rural de Gigante, en abril y septiembre de 2024.
En las últimas horas el ente acusador presentó elementos materiales probatorios que dan cuenta de la posible responsabilidad de estos dos hombres en las muertes recientes en zona rural de Gigante.
Según las indagaciones estos dos hombres con otras personas, serían los propietarios de un laboratorio para el procesamiento de cocaína, ubicado en la vereda San José, en el sector Cerro Matambo, a orillas de la represa El Quimbo.
Al parecer, asesinaron con armas de fuego a un grupo de hombres y mujeres que llegaban hasta esta parte de la región, y posteriormente ocultaron los cuerpos en fosas.
Entre las víctimas está una mujer natural de Rovira (Tolima) y su compañero sentimental; y, otras personas nacidas en Huila, Antioquia y Caquetá, que fueron reportadas como desaparecidas entre junio de 2022 y septiembre de 2023.
Por todo lo anterior, funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), con apoyo de la Policía Nacional y el Ejército Nacional, capturaron a Rojas Andrade en el barrio Picaleña, en Ibagué (Tolima); mientras que Valencia Contreras fue notificado de este nuevo proceso en su contra en el lugar donde permanece privado de la libertad por otros hechos delictivos.
Un fiscal Gaula de la Seccional Huila los presentó ante un juez de control de garantías y les imputó, de acuerdo con su eventual participación, los delitos de homicidio y concierto para delinquir, ambas conductas agravadas; desaparición forzada, y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
Los investigados no aceptaron cargos y deberán cumplir media de aseguramiento en centro carcelario, mientras tanto el proceso continúa para dar claridad a las familias que piden justicia.